La obesidad es una enfermedad crónica ocasionada por múltiples factores, y sus causas representan una interacción entre genética, metabolismo, dieta y niveles de actividad física.
Es un factor de riesgo significativo para el desarrollo de diversas enfermedades que pueden afectar a nuestro organismo en la edad adulta.
Hoy en día se sabe que la enfermedad periodontal no es únicamente un problema de salud oral sino también un problema asociado a la salud general del paciente. Diversos estudios han demostrado que la respuesta del paciente a las bacterias que afectan a nuestra salud bucal, representan un punto crucial en el desarrollo de la enfermedad.
El vínculo entre la obesidad y la enfermedad periodontal se debe a las adipoquinas, encargadas de regular el exceso de grasas en el organismo, y que afectan a la respuesta del sistema inmune del huésped. Este estado de inflamación, activa sustancias que producen la destrucción de los tejidos que rodean al diente, afectando también a la destrucción del hueso , signo característico de la periodontitis.