La salida de los dientes puede ser un tema difícil de gestionar para los padres. A los bebés puede llevarles algún tiempo antes de que aparezca el primer diente. Este proceso, puede ser largo y agotador, pudiendo causar trastornos a la hora de dormir al pequeño.
Mientras que algunos bebés y niños pequeños parecen no tener ninguna molestia, ni un mínimo de dolor cuando brota el primer diente, otros bebés pasan días muy incómodos y con mucho dolor y, por supuesto, la incomodidad y el dolor generalmente se traducen en ¡NO DORMIR!
Algunos bebés dormirán perfectamente mientras que otros tendrán muchos despertares nocturnos. Algunos expertos dicen que la dentición no tiene por qué irrumpir en el sueño. Obviamente, todos los bebés son diferentes y todos tendrán diferentes tolerancias al dolor, pero en pequeña o gran medida puede afectarles.
¿Cómo podemos saber que ese malestar del pequeño y, sobre todo, esa alteración en su ritmo del sueño puede estar producido por la salida de un diente? Existen ciertos síntomas que nos pueden alertar de ello:
– Babea más de lo habitual.
– Tiene un sarpullido en la barbilla debido a la saliva.
– Sufre diarrea (tragar saliva adicional puede hacer que la caca de tu hijo sea más intensa de lo normal).
– Se niega a comer (las encías sensibles hacen que sea difícil amamantar y comer con comodidad).
– Muerde más de lo habitual.
– Aumentan los despertares nocturnos.
– Está más nervioso o llora más de lo habitual.
¿Qué podemos hacer?
Afortunadamente, hay formas en las que puedes darle consuelo y mantener los buenos hábitos de sueño:
– Teniendo en cuenta que los dientes de leche irán saliendo en un periodo de 2 años, trazar un plan sobre cómo manejarlo puede ser muy conveniente ya que cada vez que brote un diente no se puede convertir en un problema de sueño.
– Si está amamantando, seguramente el dar pecho le calme, ¡Ten cuidado de no crear una asociación de sueño con la lactancia para dormir!.
– Consulta con tu pediatra si puedes darle analgésicos. Y, también si tiene fiebre o cualquier síntoma de enfermedad.
– Los mordedores son una buena opción para la dentición, ya que ayudan a minimizar el dolor. Muchos de ellos están diseñados para ser enfriados, ya que el frío puede ayudar a adormecer las encías de tu hijo y así aliviar el dolor.
En La Clínica Dental Couce nuestro gabinete de odontopediatría está a tu servicio para resolver todas tus dudas.