La SEDO (Sociedad Española de Ortodoncia), lleva años advirtiendo del grave riesgo que supone adquirir tratamientos de ortodoncia, como alineadores por Intenet. Es fundamental que este tipo de procedimientos sean pautados y supervisados en todo momento por profesionales cualificados.
La ortodoncia en adultos va en aumento y los alineadores transparentes son uno de los sistemas de ortodoncia más demandado en los últimos años. Son unas férulas extraíbles de plástico transparente fabricadas a medida para cada paciente siguiendo las indicaciones de un ortodoncista en función de la planificación del tratamiento.
Pero la ortodoncia no puede tomarse como una moda, es una disciplina sanitaria que debe diagnosticarla, planificarla y supervisarla un profesional cualificado para ello por ello desde la Sociedad Española de Ortodoncia queremos mostrar nuestra preocupación por la comercialización de alineadores transparentes para que el paciente se haga el tratamiento desde su domicilio, sin la debida supervisión de un ortodoncista.
– Posibles riesgos por un tratamiento inadecuado
La planificación del tratamiento y la elección del aparato más adecuado es un proceso complicado en el que hay que valorar numerosos factores, por ejemplo, puede haber una alteración en los tejidos que fijan el diente al hueso o en los propios huesos de la mandíbula y la maxila. Por ello es imprescindible realizar una correcta planificación que tenga en cuenta todos los estos aspectos y escoger el tipo de tratamiento en función del caso concreto. Un tratamiento inadecuado puede provocar problemas en la apertura y cierre de la mandíbula, alterar la ATM (articulación temporomandibular), así como dolor, lesiones dentarias, de los tejidos de sostén del diente, del ligamento periodontal, del hueso y encías, movilidad dentaria, reabsorción de la raíz del diente, e incluso pérdidas de piezas dentales. Éste es uno de los motivos por los que estos tratamientos no se pueden realizar en casa sin ninguna supervisión y sin que un odontólogo o estomatólogo realice un seguimiento del desarrollo del tratamiento para comprobar que evoluciona según lo esperado y pueda intervenir a tiempo en caso de que no sea así.
Es por ello que la SEDO advierte de que la compra y uso de los kits de alineadores transparentes sin la necesaria supervisión de una persona autorizada para realizar ortodoncias puede poner en riesgo, no solo la salud de la boca, sino la salud en general de todo el organismo.