Los frenillos bucales son bandas de tejido conectivo fibroso, muscular o ambos.
Las alteraciones en el desarrollo de los frenillos pueden dar lugar a:
- Problemas ortodóncicos.
- Problemas protéticos.
- Patología periodontal.
El frenillo labial superior es un repliegue de la mucosa bucal, que parte de la cara interna del labio y va a insertarse sobre la línea media, a nivel de los incisivos superiores.
La cronología dentaria, tanto al considerar su erupción como su evolución, hace que podamos delimitar dos épocas en las que los frenillos son objeto de análisis:
- La edad infantil, donde la inserción de esta banda fibrosa puede ocasionar problemas que conducen a la necesidad de tratamiento ortodóncico.
- En edades más avanzadas, la presencia de los diferentes frenillos puede plantear en numerosas ocasiones problemas protéticos, ya sea dificultando la retención de la prótesis, o bien, siendo esta misma la que produce fenómenos irritativos sobre los propios frenillos.
En el caso de que sea corto o grueso y tenga una inserción muy baja, puede provocar una cierta separación entre los incisivos superiores o alteraciones en el sellado labial (al intentar cerrar la boca).
En cuanto al frenillo labial inferior, puede propiciar defectos de la higiene oral en esa zona, responsables de la aparición de cuadros de enfermedad periodontal.
El frenillo labial superior bajo es muy frecuente durante los primeros años de vida, pero va desapareciendo con el crecimiento y el desarrollo de la boca. Por ello es recomendable valorar la necesidad o no de intervención quirúrgica después de la aparición de los caninos definitivos (11-12 años), ya que en esta etapa ya se han producido todas las fuerzas de crecimiento y desarrollo de la oclusión, que colaboran en el cierre de los espacios.
Se conoce como frenectomía labial, la técnica quirúrgica que tiene como finalidad la sección y posterior reconstrucción adecuada del frenillo labial. En general de ambos frenillo, el labial superior y el labial inferior, suele ser el frenillo labial superior el que con mayor frecuencia hay que someter a una intervención.
La principal indicación de frenectomía, es la presencia de un frenillo labial superior prominente de inserción baja en la papila palatina, en un paciente con diastema central. Otras indicaciones son las periodontales, en los casos en que el frenillo pueda producir una recesión gingival.
Antes de diagnosticar un frenillo labial como causa de un diastema, es preciso descartar otras posibles causas como:
- Dientes supernumerarios (mesiodens).
- Succión digital; el hábito de chupar el dedo pulgar puede hacer que los incisivos superiores se inclinen hacia delante favoreciendo su separación.
- Agenesias dentarias (que algún diente definitivo no se haya formado y no erupcione).
Se trata de una estructura dinámica y cambiante, sujeta a variaciones de forma, tamaño y posición durante los diferentes estadios de desarrollo del individuo. Algunos pueden ser amplios y resistentes, mientras que otros son finos y frágiles.
El espacio entre los incisivos superiores, provocado por el frenillo labial superior es muy frecuente, se observa en niños muy pequeños aún con dentición temporal, no siendo motivo de alarma pues como hemos dicho, en muchas ocasiones se resuelve solo con la erupción de los dientes definitivos. En caso de persistir, hay que esperar hasta que esté casi completa la dentición definitiva para valorar cada caso.