¿Qué es un implante? 

A grandes rasgos podríamos definir un implante, como un producto sanitario que se coloca dentro del hueso haciendo una pequeña cirugía y que viene a reemplazar la porción de la raíz de un diente perdido (una raíz artificial).

Con la colocación de implantes se pueden reponer dientes individuales, varios dientes ausentes e incluso arcadas completas, haciendo uso de diferentes medios protésicos.

¿Son todos los pacientes candidatos a la colocación de un implante?

El principal factor que hay que tener en cuenta es el estado de salud general del paciente, prestando atención a factores como:

•  Tabaquismo: es totalmente desaconsejable colocar implantes en pacientes fumadores, puesto que el riesgo de desarrollo de cuadros de periimplantitis es muy alto.
• Bifosfonatos: se trata de un tipo de medicamentos que actúan sobre el metabolismo del hueso, en estos casos tampoco es conveniente la cirugía de implantes por el riesgo de desarrollo de cuadros de osteonecrosis.
• Nivel de higiene oral: es vital que el paciente sea capaz de mantener unos niveles de higiene correctos de sus dientes, pues de lo contrario tampoco conseguirá un correcto mantenimiento y limpieza alrededor de la prótesis sobre implantes, lo cual terminará más pronto que tarde  dando problemas a nivel de los implantes.
• Nivel y calidad del hueso: este punto no sería tanto una contraindicación como un factor que puede hacer que la cirugía sea más o menos complicada, si el nivel de hueso es correcto, tanto en alto como en ancho, así como de calidad óptima, estaríamos hablando de la situación ideal para colocar un implante. En aquellos casos en los que el nivel de hueso no sea suficiente, hay que introducir alternativas como los injertos de hueso o las elevaciones de seno, que en ningún caso suponen un riesgo que no se pueda asumir.
• Espacio para la rehabilitación protética: en aquellos casos en los que haya pasado mucho tiempo desde que se produjo la pérdida de los dientes naturales, se produce la extrusión y movimientos laterales de los dientes que tienden a disminuir el espacio disponible, en estos casos a veces es necesario hacer algún tratamiento previo para recuperar el espacio antes de proceder a la cirugía de implantes. O valorar otras alternativas, cuando no sea posible obtener una altura que nos permita rehabilitar correctamente.